Cospedal a su partido en 2013: "En el PP, quien la hace la paga y cada uno aguanta su vela"

Fue en enero de 2013, cuando se conoció que Luis Bárcenas tuvo hasta 22 millones de euros en cuentas localizadas en Suiza.

Igual que ahora Pablo Casado ignora cualquier pregunta sobre la imputación de Cospedal y los periodistas reciben abucheos de los palmeros del líder del PP, entonces, durante la celebración de un cónclave intermunicipal del PP nacional en Almería, la respuesta más repetida a los periodistas por sus líderes fue “no me consta”.

Cospedal fue directa y muy dura entonces contra Bárcenas: “Desde nuestro partido se trabaja para defender la decencia y se trabaja para defender el interés general”, señaló, censurando comportamientos “injustos”. “Por eso”, aseguró, “no vamos a permitir que se eche por tierra la labor y el trabajo de tantas personas honradas y que han trabajado por defender a su país”.

Eso sí, unos minutos antes, Cospedal sorteó a los periodistas que le preguntaban sobre los pagos en B y los documentos que podía conservar Bárcenas en los que implicaba a numerosos altos cargos entre los que podían estar la propia Cospedal y Mariano Rajoy.

Fue a partir de ese momento cuando se montó el operativo para robar y ocultar a la justicia esas pruebas con las que Bárcenas podía probar que en el PP no se trabajaba tanto por defender la decencia y el interés general sino, exactamente, todo lo contrario.

Desde el Ministerio del Interior utilizaron fondos públicos para poner en marcha el operativo, con sueldo incluido al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, captado por el “policía de Cospedal” Andrés Gómez Gordo. Y se olvida la increíble historia del falso cura de Cuenca que retuvo y amordazó a la mujer y al hijo de Barcenas y ahora se encuentra en prisión pero, desgraciadamente, se le ha ido la cabeza y no puede declarar quien le pudo pagar para conseguir sin éxito el mismo objetivo que el chófer Ríos.

Finalmente será propia Cospedal a quien Pablo Casado dejará aguantando su vela tras ser imputada junto a su esposo, López del Hierro, en ese operativo al que se ha puesto el nombre de Kichen.

elObservadorDCLM