Ayuso + Feijóo = Abascal

Vaya panda de ilusos los que pensábamos que Núñez Feijóo iba a ser un político diferente y que por fin tendríamos en España una derecha responsable, moderada, sensata y auténtica que uniera por fin esfuerzos reales en beneficio de todos. Pero parece que las señas de identidad de la derecha siguen siendo exactamente las mismas y que el nuevo líder no es más que la continuidad del mismo proyecto político que trajo a España corrupción, desmantelamiento de los servicios públicos, más paro y más deuda. Un proyecto que vende lo contrario de lo que hace cuando gobierna, que presume de mejorar la economía, pero que la empeora en todos sus parámetros, que exhibe con osadía logros que nunca consigue.

A ese proyecto ya conocido se une ahora el espectáculo y la debilidad mental de una Ayuso con sus consabidas frases como “del socialismo se sale”. De lo que no se sale es de la tontería más evidente y del engaño en el que pretenden que los españoles caigamos una y otra vez.

Más de lo mismo. La derecha española, PP y Vox, votó NO en el Congreso al Decreto anticrisis con una doble intención, dar un paso más en su obsesión por destruir al Gobierno y obligarle a sumar con los votos de los que ellos llaman etarras, una monserga tan repetida como ridícula si tenemos en cuenta, entre otras cosas, que ETA pasó a la historia en gran parte gracias al PSOE. Al final, Bildu fue mucho más patriota que la derecha de las banderas y de los cuentos chinos.

La cuestión principal, que pone en evidencia la supuesta nueva imagen del PP con Feijóo, es que prefirieron seguir en esa política de acoso y de filibusterismo en vez de apoyar unas medidas absolutamente necesarias para los españoles: dieciséis mil millones de euros para abaratar el precio de los combustibles, de la electricidad, el gas, poner tope a la subida de alquileres, aumentar el Ingreso Mínimo Vital y apoyar a los transportistas que tanto movilizó la derecha, igual que a los agricultores y ganaderos.

En contra de todo eso votaron el PP de Feijóo, Ayuso y Abascal, el trino que es uno y que espera serlo aún más al frente de otros gobiernos como el de España o Andalucía.

Los castellano-manchegos conocemos muy bien cuál fue la política real del PP cuando estuvo gobernando en nuestra comunidad aunque antes, obviamente, habían prometido todo lo contrario, como bajar los impuestos o generar millones de puestos de trabajo. Fue un auténtico desastre.

Resulta muy curioso escuchar el vídeo que acompaña a esta reflexión porque la política llevada a cabo por el PP en Andalucía es exactamente la misma a la desarrollada por el PP en nuestra región en detrimento de los servicios públicos, de la sanidad, la educación o la dependencia. Parece que estamos escuchando el mismo relato de lo acontecido en Castilla-La Mancha y que es la misma política que ha hecho Feijóo en Galicia y la misma que piensa hacer la derecha aunque sea con distintos collares y sumando ahora las ocurrencias de los más rancios de Vox con Abascal a caballo como jefe de la cuadrilla.

elObserrvadorDCLM