Los regantes de Murcia lo han vuelto a hacer. No se conforman con la muerte del Tajo, sino que también están acabando con el Mar Menor

La Guardia Civil, ha llevado a cabo a través del SEPRONA, la operación “30 días en el mar 3.0”. Un proyecto internacional que ha sido desarrollado a nivel mundial por 56 países. En España el resultado del mismo ha sido la detención e investigación de 69 personas por delitos relacionados con la contaminación marina. En el marco de esta operación se han registrado 60 delitos y 70 actuaciones administrativas.

A pesar de que aún están en estudio los vertidos en Barcelona y se están analizando varias muestras de aguas tomadas en Pontevedra, ha vuelto a ser Murcia quien se ha llevado la palma con la ejecución de 4 operaciones relacionadas con explotaciones agrícolas de plantas desalobradoras que vertían salmuera al Mar Menor. Estas han sido precintadas y suspendida  su actividad, por tratarse de infraestructuras ilegales.

Estas empresas, además, captaban agua subterránea mediante estructuras no aptas, que en la mayor parte de los casos se centraba de la apertura de pozos ilegales.

La actuación dio como resultado un elevado índice de nitratos que triplican el valor máximo permitido, por lo que se investiga si la contaminación del Mar Menor, está provocada precisamente por estos acuíferos.

Lo lamentable de esta situación es que esa salida de agua de la cabecera del Tajo, con destino al Mediterráneo y a sus beneficiarias, las macro-extensiones agrarias de la zona, no solo están acabando con la cuenca del Tajo, sino también con el Mar Menor.

P. Moratilla