La pregunta equivocada

Cuando sucede algo relevante e incluso casi insignificante, los cuarteles generales de los partidos políticos se ponen a la tarea. Algo importante es una pandemia mundial. Lo otro, es ese ruido constante que los ciudadanos no entendemos aunque sí conozcamos la pregunta que todos los partidos deberían hacerse siempre: ¿Cómo debemos resolver este problema cuanto antes y de la mejor manera posible para beneficio de los ciudadanos?

Sin embargo, algunos partidos políticos, de diferentes signos, se hacen una pregunta muy distinta: ¿Cómo puedo obtener algún beneficio de este problema? O de esta desgracia. 

No es difícil identificar a quienes entienden la política como un servicio público y a quienes la aprovechan como un servicio privado. Suelen ser los mismos que, cuando gobiernan, mejoran o reducen la sanidad pública.

Cuando gobiernan y manejan dinero público, como sucede en la Comunidad de Madrid, suelen encontrar pronto respuesta a su pregunta siguiendo las mismas rutinas de su partido durante los últimos veinte años: aprovechando cada desgracia o cada asunto casi insignificante para obtener algún tipo de beneficio derivando dinero público a manos privadas y esperando luego, efectivamente, obtener algún tipo de beneficio. 

Y cuando esos mismos partidos políticos están en la oposición, como sucede en España, buscan obtener un provecho político de la desgracia, en vez de dar su apoyo para intentar entre todos resolverla cuanto antes y de la mejor manera posible para beneficio de los ciudadanos.

elObservadorDCLM