Alerta entre los cazadores por la extensión de la mixomatosis en liebres

El pasado mes de agosto, la Fundación Artemisan dio la voz de alarma: se habían detectado casos de liebres afectadas por mixomatosis en Andalucía y en Castilla-La Mancha. Pedían que se extremaran las precauciones a la hora de mover estos animales entre cotos para hacer repoblaciones. Habían aparecido algunas liebres afectadas por el virus denominado 'Poxvirus' que provoca lesiones en varias partes del cuerpo del animal que lo desarrolla, habitualmente en ojos, boca y orejas, pero no tiene ningún riesgo para el humano. Además, el documento recogía otros puntos como los signos y síntomas, la forma de transmisión o la tasa de mortalidad.

La Fundación recomendaba vigilar la posible aparición de liebres enfermas o muertas en cotos de caza y, en caso de encontrar algún ejemplar afectado, recogerlo con guantes y dar cuenta de ello a los agentes medioambientales o las autoridades sanitarias competentes para que se pueda realizar un diagnóstico "lo antes posible".

TAMBIÉN EN CASTILLA-LA MANCHA

Primero se encontraron ejemplares de liebres afectados en Córdoba y luego en Castilla-La Mancha, en Toledo, Cuenca y Ciudad Real. Portavoces de los cazadores alertaron de la grave incidencia del virus ya que la enfermedad se está extendiendo “con síntomas claros como los ojos hinchados, conjuntivitis, incluso hemorragias”.

La enfermedad en las liebres ha sido ya comprobada en laboratorios oficiales. El propio ministerio de Agricultura ha publicado ya un informe sobre los casos aparecidos en Andalucía y Castilla-La Mancha mientras que la consejería de Agricultura de Extremadura ha confirmado también la aparición de liebres con mixomatosis en su territorio. En este caso, se ha confirmado que la afección vírica parece ser el origen de la muerte de dos ejemplares que se encontraron el pasado mes de septiembre en la localidad de Guareña y que han sido analizados en el laboratorio Central de Algete (en la Comunidad de Madrid) que es el de referencia a nivel nacional para esta enfermedad. 

Ya se han adoptado algunas medidas. Los cazadores deben comunicar la presencia de liebres con síntomas a los servicios veterinarios y de medio natural a nivel nacional y autonómico, además de avisar a los guardas forestales.

A pocos días de la apertura del periodo hábil de caza, cazadores de Ciudad Real, Albacete, Cuenca y Toledo se han reunido en Campo de Criptana con el fin de evaluar la situación ya que se trata de una enfermedad muy contaminante y mortal para estos animales aunque no afecta a los seres humanos.

Entre las causas que han provocado la aparición de la enfermedad en liebres, el Ministerio de Agricultura baraja las lluvias primaverales “que elevaron la densidad de insectos vectores, sobre todo mosquitos”, en zonas con abundante presencia de conejos y liebres.

DCLM