La traición del barón rampante

PERO, ¡SI YO NO HE HECHO NADA MAL0!

¡Pero si yo no he hecho nada malo!, protestaba Pablo como un niño abandonado, en la noche del 23-F, mientras bebía una Coca-cola en la que podía ser su última cena en Génova. 

La pregunta es si puede afirmarse que Paco Núñez ha traicionado a su presidente nacional, Pablo Casado. Hasta hace muy poco, ambos se apoyaban mutuamente como es lógico entre dos compañeros de partido, ambos con aspiraciones electorales. 

PACO NÚÑEZ: “CASADO ES EL PRESIDENTE QUE NECESITA EL PP”

Paco Núñez ganó las primarias del PP en Castilla-La Mancha con el decidido apoyo de Cospedal el 27 de septiembre de 2018. El 7 de octubre fue elegido presidente en presencia de Cospedal y de Pablo Casado que también debía a Cospedal su liderazgo en el PP. Durante aquel acto, Núñez puso el partido regional “a las órdenes del presidente nacional Pablo Casado, para ayudarle a conseguir la victoria en las elecciones generales y llevarle a La Moncloa”. Núñez dijo entonces que Casado “es el presidente que necesita el PP y España”, lo que se ha demostrado, aseguraba, con su “frescura”, y con la “modernización del partido”.

El 14 de noviembre del año pasado, Paco Núñez fue reelegido presidente del PP de CLM, en presencia de Díaz Ayuso y Pablo Casado quien clausuró el congreso lanzando un mensaje de unidad. 

PACO NÚÑEZ: “NO SE ME OCURRE NADIE MEJOR A QUIEN CONFIARLE EL FUTURO DE ESPAÑA QUE A PABLO CASADO, UN POLÍTICO INTELIGENTE, HONRADO, TRABAJADOR, EFICAZ Y UN ESPEJO EN EL QUE NOS MIRAMOS PARA SEGUIR CRECIENDO”

En su discurso, el reelegido líder del PP de Castilla-La Mancha dijo que España "necesita personas que la lideren y en las que podamos confiar lo más sagrado que tenemos, el futuro de nuestros hijos y no se me ocurre nadie mejor que confiarle ese futuro que a Pablo Casado". Paco Núñez aseguró que Pablo Casado “es el mejor presidente que podría tener España; es un político inteligente, honrado, trabajador, eficaz y un espejo en el que nos miramos para seguir creciendo".

LA POSICIÓN DE NÚÑEZ DURANTE LA GUERRA DEL PP

La guerra interna en el PP se inició el 16 de febrero con la poco inocente publicación de un titular sobre el supuesto espionaje del PP de Génova contra Ayuso. En cinco días, Casado va perdiendo apoyos, en cinco días Paco Núñez permanece en silencio a la espera de que se decida quién de los dos sectores se decanta como ganador de la batalla. 

ELOGIOS DE CASADO A NÚÑEZ

El miércoles, 23 de febrero, Pablo Casado reaparece en el Congreso para preguntar al presidente Pedro Sánchez en la sesión de control. Pero su intervención se transforma en una despedida y una declaración de principios en la que reivindica la política como "la defensa de los más nobles principios y valores, el respeto a los adversarios y la entrega a los compañeros".

Es verdad que Casado se había deshecho en elogios hacia Paco Núñez cada vez que visitó Castilla-La Mancha. Durante su discurso en la clausura del Congreso regional del PP en Castilla-La Mancha, Casado se refirió a Núñez como “una de esas personas que "se lo ha currado", que ha venido "de abajo a arriba", que ha "manchado sus apuntes en la barra del bar" de su familia y que entre café y caña "se sacó la carrera siguiendo su vocación".

LA NOCHE EN LA QUE NÚÑEZ TOMÓ PARTIDO EN EL NÚCLEO MÁS DURO CONTRA CASADO

En aquella fatídica noche para Casado, la mayoría de los pesos pesados del PP ya le habían abandonado. Muchos cambiaron de opinión como los castellano-manchegos Carmen Riolobos, Carlos Velázquez y Rosa Romero. Los tres apoyaron explícitamente a Casado al inicio de la crisis pero a los cuatro días cambiaron radicalmente de opinión. 

Las dimisiones se habían sucedido. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, anunció formalmente que dejaba la portavocía del partido; Belén Hoyo, hasta ahora presidenta del Comité Electoral, renuncia al cargo; también lo hace la presidenta del Comité de Garantías, Andrea Levy, y la responsable del PP en el Exterior, Ana Vázquez. La más sonada es la de Teodoro García Egea, quien a última hora del martes anuncia su dimisión como secretario general del PP.

El todavía líder del PP reúne a sus barones en Génova en un encuentro decisivo en el que decidirá si dimite ya o espera hasta que se convoque el congreso extraordinario en el que se elegirá a su sucesor. 

A la entrada en Génova, Paco Núñez elogia a Feijóo y varios medios de comunicación presentes le sitúan ya en el núcleo más duro entre los que piden la dimisión inmediata de Casado. En ese encuentro de barones con Casado se produce otro hecho también reflejado por varios medios de comunicación. Alguien está filtrando datos desde dentro de la reunión y todas las miradas se fijan en el móvil de Paco Núñez. Él niega ser el topo de algunos medios de comunicación y afirma que usaba el móvil para comunicarse con sus padres que tienen Covid.

NÚÑEZ, AL SERVICIO DE FEIJÓO

En la cronología, se confirma otro hecho. Cuando ya está prácticamente decidido que Casado debe dimitir y que el único candidato será Núñez Feijóo existen dos posibles comunicados que lanzar a los medios. El primero es fulminante contra Casado. Lo apoya el sector más duro, los que piden que “Casado dimita ya”, entre ellos, el manchego Paco Núñez, el extremeño José Antonio Monago, el vasco Carlos Iturgaiz y la cántabra María José Sáenz de Buruaga.

Pero Feijóo, que esa misma mañana había trasladado a los barones que estaba “a disposición para tomar las riendas del Partido Popular”, prefirió redactar un segundo comunicado para ser él quien marcara sus tiempos. En ese momento pidió voluntarios para redactar un segundo comunicado, según difundió Europa Press: “El 'barón' gallego pregunta si alguien le echa una mano y se ofrece entonces el manchego Paco Núñez”.

La reunión había superado las cuatro horas. Casado consiguió continuar en su cargo hasta el próximo congreso extraordinario del partido que se celebrará los días 2 y 3 de abril.

EL BARÓN RAMPANTE

Mientras Feijóo se muestra prudente y prefiere esperar hasta conocer cómo evoluciona la investigación sobre la supuesta corrupción del hermano de Ayuso para decidirse a tomar las riendas del PP, Núñez actúa más como un barón rampante que, al contrario de lo que hizo Cósimo en la novela de Calvino, se baja del árbol para apostar por líder ganador. Es una manera de tratar de asegurar su futuro de la misma manera que propuso a Cospedal para presidenta de honor del PP de Castilla-La Mancha y luego se olvidó tras su vinculación con la trama Kitchense y de la misma manera que el 13 de febrero se puso del lado de los que aseguraron la caída de Pablo Casado.

DCLM