Vida y milagros de Vox, un invento patriotero al servicio de las élites que también manejan al PP

Cuando la Justicia acreditó la corrupción del Partido Popular y se produjo la moción de censura y la caída del gobierno de Rajoy, las élites que utilizan al PP para realizar grandes negocios cuando está en el gobierno, encargaron a un expresidente del partido y a su equipo buscar una solución ante la previsible pérdida de votos de un partido creado para servir a sus intereses. La solución fue inventar otros dos partidos que recibieran los votos de los avergonzados de la derecha, los que ya no iban a votar al PP para luego sumar escaños y volver cuanto antes al gobierno y así seguir con la misma trama corrupta que todos en la cúpula del PP conocían aunque la manejara administrativamente Luis Bárcenas.

Esos partidos creados de la nada fueron Ciudadanos y Vox. Uno recibiría los votos del centro derecha y otros los de una ultra extrema derecha disfrazada de populismo patriotero. Ambos partidos servirían para dar gobiernos al PP y solo tendrían razón de existir hasta que los votantes se olvidaran de la corrupción del PP y volvieran a confiar en él.

Los mismos que mandan en el PP, en Ciudadanos y en VOX, cuentan con un nutrido número de medios de comunicación en su poder para completar su estrategia: la vuelta al gobierno, la vuelta a los suculentos negocios. Para ello organizaron una estrategia político-mediática con el objetivo de derribar cuanto antes al gobierno de Pedro Sánchez, el acoso y la destrucción de la imagen de sus líderes.

Así, Ciudadanos parece ya un invento amortizado que en un momento soñó y vendió que podría funcionar con cierta autonomía. 

VOX ocupó el espacio de los nostálgicos del franquismo y fue preciso inventar a marchas forzadas su ideario populista machista, racista, españolista para conseguir votos y luego regalárselos al PP aunque haciendo el paripé de apoyarles con ciertas condiciones y a regañadientes.

La estrategia populista diseñada para VOX se centró en el patriotismo, la España de las banderas y de las pulseras, aprovechando la política de los regionalistas y del separatismo catalán. Argucias para insuflar españolismo, con el fin último de que caiga el gobierno de Sánchez y vuelva a La Moncloa el PP para retomar el control y seguir haciendo negocios.

¿Quiere esto decir que las élites, creadoras de Cs, VOX, Ayuso y Feijòo, realizan un concienzudo y descarado trabajo para manipular conciencias en su beneficio?

Obviamente, no se explica de otra manera que personas de clase media o baja voten a esa derecha que nunca va a beneficiarles cuando estén en el gobierno porque jamás lo hacen, todo lo contrario.

Con todo lo dicho se pueden entender algunas contradicciones de VOX que de un lado vende una España grande y sin autonomías y luego se presenta a las elecciones autonómicas, cobra sueldos tras ocupar sus escaños y apoya al PP para formar gobiernos, que es de lo que se trata. El eurodiputado de VOX Jorge Buxadé dijo en Toledo que las Cortes de Castilla-La Mancha deberían disolverse y poner en su lugar un cuartel de la guardia civil. Al mismo tiempo, se presentan a las elecciones de mayo para intentar conseguir los máximo escaños en las mismas Cortes y apoyar al PP para que pueda formar gobierno. Más de lo mismo. 

Se trata de un invento tan cutre y tan lamentable pero, en ocasiones tan efectivo, que desemboca en esperpentos como la moción de censura con un excomunista al frente, ideada por un personaje que fomentaba el consumo de hachís, Tamames y Sánchez Dragó, al servicio de las élites con el fin último de echar al gobierno actual y poner en su lugar a otro que, obviamente, sirva a sus intereses porque forman parte del mismo entramado empresarial que siempre dirige hacia sus negocios el dinero público.

Siguiendo estas claves, es posible entender algo de todo este negocio, una auténtica casa de apuestas en la que durante muchos años el tesorero fue Bárcenas aunque todos ellos formaban parte del casino.

Hagan juego para derribar al gobierno para después hacerse con la banca.

Esos son los patriotas.

elObservadorDCLM