DCLM.ES · OPINIONES · Francisco R. Breijo-Márquez
15.12.2015
Muy indeciso, gracias a Dios: ¡Mucho de nada, nada de mucho!
Por Francisco R. Breijo-Márquez
Ayer me levanté con cuerpo de jota. O muy similar. O eso me ha parecido. O, vaya usted a saber –soy un «Indeciso de fábrica». Con una discreta avidez por discutir todo aquello que me resultase merecedor de ello. O sea, todo. O sea, nada.
Un servidor, tal vez como usted, no debe entender un carajo de casi nada por lo que se enredan y enrollan estos tipos con distintos coloretes en sus estandartes. ¡Tanto cascar, tanto cascar! Para luego nada. Nada nuevo vislumbrable en los supuestos nuevos horizontes, so pena que tanta cascarria les sirva a las boticas para vender más estrepsil.
Como no aprendo, (por muchos cursos acelerados de Reiki, Rebirthing- y otros más sofisticados si cabe- a los que me he apuntado, con vestimenta acorde, y todos los libros del Coelho que me he comprado – para aprender a ser feliz sin el más mínimo esfuerzo- que he apilado en el aparador junto a las obras completas de Sócrates -el hombre no escribió ni la 'i con canuto'- además de un tochazo atiborrado de citas mezcladas de Einstein, Buda, Gandhi, Galeano y otros inestimables citadores) y la curiosidad me sigue carcomiendo de vez en cuando, pues en mis tiempos de merecido solaz y descanso no tengo otra mejor que abrir el ordenata y echar un vistazo a todo diario digital que aparezca por la compuerta del pecé.
Abrumador, oiga… ¡Atosigante!
No obstante, persisto en mi tesón. Oye.. ¡ya que he empezado…!
Como es el último día permitido por lo visto para publicar los últimos sondeos a fin de que todo quisqui esté "plenamente seguro" de cómo van los tiros electorales, y cómo lo que ayer era simpatía, hoy puede ser repulsión, pues me he hinchado de ver muchos arcos iris de tendencia votadora. Me he quedado hecho un carámbano, oiga; no tanto de ver los mismos colores (azul, rojo, morado y naranja sobre todo) sino de ver los números que acompañan a cada uno de ellos. ¡Un desbarajuste!
Para mí que estas empresas demoscópicas deben tener un ramalazo mercenario: «Tanto me apoquinas, tanto te engrandezco y mermo a tu malhechor». O parecido. Las cifras y tendencias son tan dispares que le entran a uno unas ganas de mandar a tomar viento al Reiki, al Coelho y a todos los citadores anteriormente mencionados y lanzarse a grito pelao a la calle en busca de una Academia de Matemáticas…por lo que más quieran, que no entiendo un solo digito ya. ¿En qué quedamos? Será que se hacen al buen tuntún como los horóscopos (que, por cierto, es lo primero que leo: ¡cualquiera se atreve a salir a la calle sin saber qué ánimos tengo, que suerte me espera y con qué y quién he de tener cuidado o no!). En otro caso, no se entiende.
Uno- que tampoco pudo votar en la Constitución78- comentaba anoche, ya tarde, con Santiago,- vía güasap- que no he sido en la vida un politiquero; que no me interesa la Política más allá de lo que pueda acarrear a nuestra ya perra vida. Y mucho menos me interesan sus Ejecutores (distintos perros pero con los mismos collares de siempre, bastante más marchitos eso sí). Que me limito a empacharme una jartá de las interpretaciones que tienen los nuevos perros, los sempiternos sabihondos, y de cómo intentan metérnosla por el embudo más angosto sea como sea. Ni más ni menos.
Como por lo visto no tuve bastante con el «Decisivo Debate Decisivo» (vaya bodrio, la virgen), pues no tengo otra que zamparme el «feis tu feis» del Rajoy y el Sánchez. Acompañados por una especie de convidado de piedra- a quien tengo en mucha estima, conste – que me rayaba un partido de tenis Federer-Nadal, por ejemplo, mirando a derecha y a izquierda pero sin decir ni mú, ni poner orden –y mucho menos concierto- ante los exabruptos, descalificaciones y los eternos e inacabables "pues , anda que tú" de los plúmbeos debatientes.
La cosa no empezaba mal para el Sánchez en el primer asalto (mejor que en el «Decisivo Debate Decisivo»…dónde va a parar: sin ser agresivo pareciome contundente. Llenósele la boca de lo de siempre, pero en más categórico: Derogación absoluta de una Reforma Laboral infame – lo tomes por dónde lo tomes-; la "Gloria en cinemascope" para nuestros viejos; un porrón de cosas buenas-buenas para los Dependientes y sus cuidadores… Que iba a desmantelar todo lo hecho por los azules, vamos, con su compromiso y palabra de honor incluida. El Rajoy, mirada abajo sobre mogollón de papelujos, en su esquina, callaba y sonreía socarronamente de momento; apareciéndole el impertinente tic palpebral izquierdo (¡si será traicionero el muy bribón!). "Usted miente Señor Rajoy (se jartó de decir 'Señor Rajoy')". "Usted no es decente" (¡para qué quieres más tía Eulalia!)… ¡Puaff! "Hasta ahí hemos llegao" díjole el Rajoy. ¡Un rifirrafe arrabalero, cual gitana que vende todas las mañanas 'ajos de la Pedroñeras' a pavo los 3 kilos!...que ¡ni digno de apretar teclas oiga!)
Un 'dime que te doy y un te doy como me digas' de los de siempre. ¡Inagotable!
Le digo, güasaperamente, a Santiago que me tienen hasta los 'tomas'. Pregúntame él que ¿qué tomas? Una "Estrella Galicia" ("Levante" tampoco está de más), gracias, repondile yo. Contéstole yo que Page ya lleva el suficiente tiempo como para haber hecho algo efectivo y no efectivista. Dale tiempo, dice él. Que anda el buen hombre muy liao con lo del 20-D, sigue diciéndome- por güasap, claro- . Que se debe a su Autonomia, díjole yo (un día de estos, de los más pensados, escribiré sobre qué coño significa Autonomía, que esa es otra). Que, de momento y va para seis meses, poco he visto yo plasmado de sus promesas y compromisos. Que, vale, sigo diciéndole. Que me cae dabuten y sigo confiando en él (y en Iñigo Cortázar, que es realmente dabuten). Pero que no sea muy tortuguero, vaya y le pille el toro.
Acabamos conversación. Hasta mañana si Dios quiere, nos despedimos ambos.
Y, un servidor, incesantemente muy Indeciso para su voto "no vendido", gracias a Dios y porque Él quiere. Porque sigo estando empachado de "Mucho de Nada y Nada de Mucho", de tanto "distinto perro con iguales collares cochambrosos". Me voy a acostar. Seguro que sigo durmiendo cual ceporro iluminado.
Un tal Molina (no recuerdo el primer apellido, enlazado cual el mío) dice, en plan mitinero, que si la Cospedal está fuera es gracias a ellos. ¿Y qué haces, amigo, con el resto? ¿A verlas venir según el viento más amable para tus velas? ¡Anda ya! Que si tú diste tu V.B. a Page (me alegra…de momento) al fin, a la postre, y a todo lo demás, mucho proclamar que «Pactos los indispensables y en beneficio del Pueblo»…Pero, como siempre, mientras haya una poltrona a sentar vuestro real trasero- seguiréis siendo volatineros de salón.
¡El Bipartidismo ha terminado! ¿Viva el Pactarismo? Pues no, miren ustedes.
Yo no acabo de estar muy indeciso, gracias a dios: ¡mucho de nada, nada de mucho!
A la hora de comer (o cenar), máxime en estas dulces y tiernas épocas de fraternidad "pactada y repetitivamente estúpida", tengo mucho poder de convicción. De 100 o 200 votos no baja – estadísticamente hablando- mi criterio. Y si canto un villancico pidiendo el agunaldo…¡guau!
¡Como se lo digo!
Francisco R. Breijo-Márquezhttp://www.linkedin.com/pub/francisco-r-breijo-marquez/24/2b0/15a/
http://my.americanheart.org/professional/index.jsp
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