La desvergüenza del PP en el peor momento de la crisis

El mismo martes en que María Dolores de Cospedal y su esposo, López del Hierro, confirmaron positivo en coronavirus, el Partido Popular, a través de su portavoz Teodoro García Egea, endureció su tono contra el gobierno de Pedro Sánchez al que acusó de "total imprevisión" e "inacción". El mismo día en que España superó los 500 muertos en un día y adoptando un papel electoralista en tiempos de una realidad social tan dramática, García Egea pidió que el gobierno “se tome en serio” lo que está pasando y acusó a Sánchez de haber “subestimado los riesgos por no haber adoptado medidas a su debido tiempo”.

El portavoz del PP debe saber que en todos los países del mundo se han ido adoptando las medidas según las recomendaciones de los expertos, y de los índices de penetración que se iban conociendo cada día, según el avance real de la enfermedad. Resulta miserable hablar en casos como este a toro pasado después de conocer la evolución del virus. Sabe que todo gobierno debe ir acompasando sus medidas de presión y confinamiento de la población teniendo en cuenta otros aspectos como el estrangulamiento económico y el pánico que se puede desatar entre la población.

En cuanto a la previsión de la Sanidad Pública, nos hemos referido a Cospedal -a quien deseamos, igual que a su esposo, su rápida y total recuperación- porque, bajo su gobierno, Castilla-La Mancha fue la región que más recortó en sanidad, más de tres mil profesionales y dos mil millones de euros. Algo similar sucedió durante muchos años en la Comunidad de Madrid donde los sanitarios organizaron numerosas protestas y concentraciones contra los recortes.

Por fortuna para los castellano-manchegos, el PP perdió las elecciones en 2015 ya que el gobierno tenía previsto recortar las plantillas de sanidad en otras 5.752 plazas.

Con el gobierno actual, se han recuperado en Castilla-La Mancha 3.614 plazas en la sanidad pública y ya se han invertido 600 millones de euros más que en ese año de salida del gobierno del PP.

Sin embargo, el actual gobierno del PP de Madrid ha seguido con los recortes en la sanidad pública porque ese es su programa que aplica allí donde gobierna, tratando de emular a otros países que favorecen a la sanidad privada como Estados Unidos.

Además de pedir disculpas por esos recortes para estrangular la sanidad pública, una de las mejores del mundo, el PP debería apoyar en todo momento a España y a su gobierno. Muchos tiemblan solo de pensar que esta crisis la hubiera tenido que afrontar Pablo Casado, la marioneta de Aznar: ¿habría cerrado Madrid la primera semana? ¿Cuáles habrían sido sus decisiones? ¿No le habrían presionado los grandes empresarios para que los trabajadores siguieran acudiendo a trabajar y no se cerraran los comercios? (*).

Dejen ya de hacer política, aporten apoyo y la misma solidaridad que ha pedido a todos el Ministerio de Sanidad con la Comunidad de Madrid.

elObservadorDCLM

(*) ("No morir por Wall Street", la cadena que ya es trending topic en EE.UU, contra la decision de Donald Trump que asegura en su cuenta de Twitter "Nuestro pueblo quiere volver a trabajar" y considera más importante el impacto económico que el sanitario: "EEUU no está hecho para ser cerrado, añadió Trump, "me encantaría tener el país listo para Semana Santa". Ayer, la Organización Mundial de la Salud señaló a EEUU como "el próximo epicentro de la pandemia").