Cultura taurina. Cogida y muerte de José Mata en Villanueva de los Infantes

La muy noble ciudad de Villanueva de los Infantes, cuyo nombre data del año 1421, por privilegio del Infante don Enrique, no tenía en su centro histórico, ni siquiera en sus aledaños, una plaza de toros. De nada servía el hecho de tener por vecina la localidad de Santa Cruz de Mudela, en cuyo santuario de Las Virtudes se halla, nada menos, que la segunda plaza de toros más antigua del mundo. Plaza que se encuentra en un excelente estado y en la que cada año se tiene a bien organizar algunos festejos taurinos.

Pero los vecinos de la noble Villanueva de los Infantes deciden, en el año 1971, celebrar también sus fiestas de toros en una plaza cerrada. Como Dios manda. Aunque para empezar tengan que conformarse con una portátil. El día de la inauguración se fija para el 25 de julio. El cartel anunciado inicialmente era: toros manchegos de Luis Frías Piqueras para los diestros Juan Asenjo (Calero), Francisco Ceballos y Antonio Millán (Carniceríto de Úbeda).

Calero se cae finalmente del cartel y José Mata es requerido para ocupar su puesto. En aquel tiempo El Canario, con cuyo nombre comenzó su corta carrera por ser natural de la isla de La Palma, gozaba de buen nombre en todo el territorio nacional. Tomó la alternativa en Benidorm de manos de Manuel Benítez El Cordobés, el 8  de agosto de 1965. La buena amistad que le unía a Manuel Benítez posibilitó que Mata protagonizara una película junto a él. El 19 de septiembre del 65 ganó el trofeo “Oreja de Oro” en Ceret, Francia. El 12 de octubre del mismo año, confirma la alternativa en Madrid de manos de Andrés Vázquez.

Se da la circunstancia de que José Mata estaba anunciado para ese mismo día en un festival, pero al llamarlo para Villanueva, decidió cambiar el contrato por ser este último más importante. El primer toro de su lote, de nombre Cascabel, negro bragao, marcado con el número 128 en los costillares, lo prendió por el muslo derecho y le rompió la femoral. El largo camino recorrido con un torniquete hasta llegar al madrileño Sanatorio de Toreros, fue un tema muy controvertido. La tardía operación en el Sanatorio no pudo evitar su muerte, que tuvo lugar a primeras horas de la noche del día 27.

Los toros de Luis Frías pastan a escasos kilómetros  de Villanueva de los Infantes, en Villamanrique. El apellido Frías en bien conocido en Castilla –La Mancha y representa una de las vacadas más antiguas. A principios de siglo, Jerónimo Frías la fundó con toros de la Casta Jijona, la más antigua y también oriunda de Ciudad Real. En 1922 esta sangre fue renovada casi en su totalidad al adquirir un lote de 200 vacas de Veragua y un semental de Santa Coloma.

José Tomás Frías y sus hermanos heredaron la ganadería y en 1941 le compraron a Samuel Flores un semental de procedencia Ibarra-Parladé-Gamero Cívico. A finales de la década de los cincuenta la ganadería se dividió en dos partes. Con una de ellas se queda Luis Frías Piqueras. La otra continuó a nombre de José Tomás Frías y hermanos.

Luis Frías debutó en Madrid el 6 de agosto de 1961, pero lo cierto es que casi todas sus corridas se lidian en plazas de la región manchega. Desde 1975 se anuncian como herederos de Luis frías.

José Mata fue consciente hasta el último momento de la gravedad de la cornada y unas horas antes del fatal desenlace le dijo a su picador: “Esto se acaba Moro”. La tarde de la fatal corrida sería su propia esposa, la francesa Marie France Goudard, la que metió la mano en el sombrero del mayoral para sacar la papeleta de los toros que le habían de tocar en suerte, en este caso, en mala suerte.

Todos los vecinos de Villanueva de los Infantes mostraron su talante de hidalgos manchegos erigiendo en su honor un busto conmemorativo.

Ángel Alcalde