Cs, entre la incoherencia y la indecencia

Ciudadanos está adquiriendo una original forma de publicitarse. A falta de propuestas sustanciales, han puesto en marcha la estrategia que en mi pueblo llaman “tirar el carro por el pedregal”. Dicho de otra forma, han tomado consciencia de que su recorrido político está en retroceso, que a poco más pueden aspirar y no saben qué hacer. Son ese hijo que quiere ser rockero, hippie, pijo, gótico, deportista… en función de con quién salga a cenar. Y claro así no se puede. 
Por la mañana son el centro moderado, por las tardes ya despuntan como derechita pop y por la noche chocan los cinco con los chicos de Abascal. 

No me atrevería a clasificarlos entre derecha moderada, derecha derechona o extrema derecha porque presentan un popurrí que los tiene hechos un lío a ellos mismos, imaginen al espectador de turno. Aunque, si me lo permiten, sí diré abiertamente que centro no son. No querían ser ni PP ni PSOE, pero lo cierto es que al mezclar su naranja con el azul de su colega de juegos, les ha salido un verde muy resultón. 

Y en esas estamos cuando se zambullen de cabeza en una nueva polémica (así a lo loco, sin echarse un poquito de agua en la nuca para hacer cuerpo). Con la fiesta del Orgullo como telón de fondo se hacen llamar los defensores del colectivo LGTBIQ+ y claro querían estar en primera fila defendiendo… Bueno sí, sólo les interesaba defender su imagen de partido modernillo y de repente ocurre algo imprevisible. 

Llega el desfile del Orgullo y centenares de personas (seguramente más) les abuchean, les gritan que se vayan de esa fiesta en la que los asistentes únicamente defiende la libertad de cada persona para ser lo que le dé la gana. Pero quién podía imaginar que las personas que habían salido a manifestarse, a defender sus derechos, nuestros derechos, iban a estar en contra de los partidos políticos que pactan con la extrema derecha, rancia, homófoba, machista, intolerante, racista. La misma derecha que quiere restarnos los derechos y libertades por los que muchas personas han dado su vida. 

Se escandalizan porque en la manifestación se escuchan gritos que dicen “con Rivera, no”. Pero no sienten ni un ápice de vergüenza de sentarse a negociar con Vox. Al menos, es paradójico. 

Claro que los de Rivera pueden asistir a cualquier manifestación, faltaría más. Pero debieran hacerlo desde la coherencia. No se puede decir que se está a favor del colectivo LGTBIQ+ y acto seguido pactar con Vox, cederles poder. Es incoherente y también indecente. 

De hecho, las declaraciones de Inés Arrimadas a posteriori son la mejor prueba de que Ciudadanos va en un barco a la deriva capitaneado por políticos que no han entendido nada. 

"Los fascistas que nos han intentado echar hoy; no se saldrán con la suya", dice la líder de la formación naranja, sin sonrojarse ni nada. Aunque sí se le escapa una sonrisa porque cree que ha conseguido lo que quería, victimizarse. Pero se equivoca y mucho. Llama fascistas a las personas que han luchado contra el fascismo, llama fascistas a quienes se levantan para defender nuestros derechos, los de todos y todas. Utiliza el término fascismo como lo hacen todo en ciudadanos sin coherencia y con indecencia. 

Suerte, que este país, esta tierra tiene memoria, y aunque le falta memoria histórica (mucha), cada vez sabemos mejor lo que queremos, pero sobre todo aquello que no queremos. Por cierto, “con Rivera, no”.

Artemis Rural

Quien pretende usar una fiesta y una manifestación tan pura y bonita como es el orgullo LGTB para significarse y darse voz a costa de desprestigiar al colectivo no merece la más mínima mención. NI UN PASO ATRÁS.

— Carolina Iglesias (@percebesygrelos) 6 de julio de 2019

Para Ciudadanos todos son fascistas menos con los que pactan gobiernos.

— AntonioMaestre (@AntonioMaestre) 7 de julio de 2019

Desafíos pendientes de Inés Arrimadas:

Colarse en una boda y sentarse en la presidencia.
Saltar de espontánea en la final de la Champions.
Entrar sin acreditación en un paddock de F1.
Meterse hasta la cocina de la Reserva Federal.

Tratar a todos de "fascistas" cuando la echan. pic.twitter.com/P3kgnm18IN

— Lucio Molina (@luciomolina) 6 de julio de 2019

Me hace gracia ver a Inés Arrimadas quejándose de que no dejan a Ciudadanos apoyar al colectivo LGTBIQ+ en el #OrgulloMadrid2019 ¿Sabes cómo se apoya al colectivo, Inés? Fácil: No pactando con la ultraderecha.

— Roy Galán (@RevolutionRoy) 6 de julio de 2019