Moya y Castejón tendrán alcaldes por casualidad

Mientras algunos municipios piensan en la fecha de constitución de su Corporación Municipal, otros están inmersos en una rueda de pactos, acuerdos o alianzas que hagan posible nombrar al que será alcalde los próximos años, pero existen otros que aún no saben quién será su alcalde.

Quienes votan listas cerradas creadas por un partido político pueden ignorar que en determinados Ayuntamientos, debido a la escasa población, tienen un lujo que se pueden permitir, que es el de votar a la persona, que a su vez representa a un partido político, y configurar de un modo mucho más exclusivo y singularizado su lista, puesto que los vecinos son quienes eligen a la postre los concejales que tendrá su Consistorio uno a uno. 

Así en Castejón tienen que elegir 5 concejales. Los resultados del pasado día 26 de mayo han dado como ganadores a 2 concejales del PP y 1 del PSOE. Faltan por tanto dos concejales más y es aquí donde llega el enigma porque existen 4 concejales, 2 del PP y 2 del PSOE que han empatado en número de votos, por lo que su resultado está pendiente de un sorteo que se celebrará este viernes. 

Por su parte Moya tiene un empate técnico entre PP y PSOE que han sacado el mismo número de votos, por lo que se han asegurado 2 concejales cada uno de ellos, pero falta saber quién será el quinto. El candidato del PSOE ha sido el más votado, por lo que la lógica debería marcar el color del alcalde, sin embargo, el enigma no lo resolverán los votos de los vecinos, ni la mayoría alcanzada por el vecino con más votos, sino el azar o el destino, ya que la solución propuesta por la ley electoral así lo establece: "Cuando hubiera dos candidaturas con igual número total de votos, el primer empate se resolverá por sorteo”.

Este precepto es de aplicación para las elecciones al Congreso de los Diputados, para las del Parlamento Europeo y para las locales y su único objetivo es no tener que repetir la votación, claro que teniendo en cuenta que son sólo un puñado de vecinos, bien podría repetirse la votación, porque el resultado que salga de "una casualidad", que se puede llamar suerte o azar, siempre será injusto. 

Por tanto solo cabe esperar "que la suerte les acompañe". 

DCLM