VOX existe y está en el Guasap / Gabriel Gomar

A estas alturas de la contienda electoral ya todos los analistas de comunicación política coinciden en que el partido de ultraderecha VOX ha prescindido de los métodos tradicionales de comunicación para sumergirse en las redes sociales privadas, la más privada es WhatsApp, donde se desenvuelve como pez en el agua.

De ahí que a Abascal no se le vea en los circuitos de actos públicos que hacen los líderes de los demás partido. En realidad no es un estrategia original, su procedencia es trumpiana, y su razón de ser muy simple: sus ideas no pueden ser exhibidas al gran público y no deben estar sobrexpuestas diariamente en una larga campaña. Su estrategia es doble, por un lado crear tramas de fieles en redes privadas que aguantan cualquier barbaridad por dura que sea, incluso la de incluir noticias falsas, “fake news” de verdad, no como las que dice Casado que sufre, del tipo “unas niñas han sido agredidas por feministas radicales por negarse a lucir un lazo morado”. Y, por otra, crear debate de combate en otras redes para alimentar la confrontación y la polarización. De esta manera evitan, además, el desgaste que supondría estar mostrándose tal como son, limitando a conveniencia sus salidas a la opinión pública masiva. Es un ejército subterráneo que crece sin oposición. 

El caldo de cultivo de rencor y agresividad que proporcionan los grupos de WhatsApp es terrible. Que se lo pregunten a los docentes que sufren los grupos de padres “evaluando” su labor en función de cómo le va el curso a niño o la de cualquier red de fanáticos de un deporte o una religión. Es un sistema de retroalimentación del mal rollo que llega a producir un universo paralelo de fobias y filias. En realidad es hablar sin mirarse a los ojos, es vomitar la ira sin tener que ver la cara que pone el que tenemos enfrente. Sólo hay que seleccionar muy cuidadosamente a los integrantes, introducir los debates que se quieran en base a hechos que pueden no ser reales y dejar que la cosa fluya. 

Gabriel Gomar