La manifestación del odio

La convocatoria de la derecha y la extrema derecha para este domingo en Madrid, viene con la alfombra roja de la demencia y el insulto. PP, Ciudadanos, Vox, Hogar Social y la Falange buscan la foto en la Plaza de Colón de miles de desaforados batiendo banderas de España y dirigiendo proclamas contra los independentistas.

Ni siquiera la concentración es para echar a Pedro Sánchez del Gobierno, al presidente le echaría una moción de censura –y no cuenta con el suficiente apoyo- o una hipotética convocatoria de elecciones. La cita busca sacarla, a ver quién tiene más grande el mástil de la bandera, porque en la derecha hace un tiempo que se están midiendo a ver quién es más español.

Este domingo, 10 de febrero, arranca la campaña a todas las elecciones que quedan por venir. Lo hace dos días después de que el Ejecutivo Central haya roto todas las negociaciones con los independentistas y haya tirado la toalla. Se podrá decir de todo sobre el acercamiento de Pedro Sánchez a los secesionistas, pero una de esas cosas de las que se pueda hablar es de que lo ha intentado y que ya ha hecho más en unos meses que Mariano Rajoy.

A la derecha y a los independentistas les va bien el conflicto electoralmente, porque así tienen qué vender a su electorado, pero en algún momento unos y otros les tendrán que explicar a la gente por qué España está perdiendo un valioso tiempo en buscar buenos y malos, en lugar de poner en práctica políticas que piensan en la gente. Los socialistas siempre estuvieron para el PP y demostraron mayor sentido de Estado, apoyando la aplicación del "Artículo 155" y colaborando cuando gobernaba el PP en todas la negociaciones para el fin de ETA. En cambio los populares, no han sido nunca ejemplo de lealtad y para muestra un botón.

El PSOE no sacará los Presupuestos adelante, no habrá podido agotar la legislatura como tenía pensado, pero está consiguiendo ponerse a toda la izquierda detrás, la que huye de los fantasmas del pasado que resucitarán este domingo. Los patriotas del “Paquí Pallá”, los que se cenaban en navidad el dinero de los madrileños, nos van a decir ahora que son “muy españoles y mucho españoles”. Y los otros “muy catalanes y mucho catalanes”.

ElObservadorDCLM