¿Quo vadis Ciudadanos?

Albert Rivera y Ciudadanos en su conjunto, sostienen que "habrá pactos con los socialistas mas alejados de Pedro Sánchez" y mienten cuando hablan.

No hay nadie más alejado de Pedro Sánchez que Susana Díaz y sin embargo no quieren saber nada de ella. No es posible el pacto en Andalucía con una socialista enfrentada a Sánchez, pero si lo es en Castilla-La Mancha o en Aragón, donde sus presidentes dan opiniones pero no hay intención de iniciar una guerra contra Sánchez.

García-Page y Lamban tienen no solo el derecho, sino la obligación de decir lo que piensan de cada uno de los movimientos que hace el presidente del Gobierno y secretario general de su partido, pero eso no significa que haya dos partidos socialistas, ni dos facciones dentro del mismo, sino un solo partido donde se respeta tanto la libertad en la toma de decisiones, como la libertad de expresión, sin perder por ello ni un ápice de identidad, porque los socialistas no son solo García-Page, Lamban o Sánchez, sino mucho y muchos más. 

El juego camaleónico de Ciudadanos les ha llevado a un acantilado de vértigo donde intentan colocarse al sol que más calienta, conscientes de no ser capaces de una victoria, para gobernar en coalición con quien haga falta, y así lo han demostrado ya en Andalucía pactando con Vox y con el Partido Popular, eso dejándonos claro que en Aragón o Castilla-La Mancha lo harían con el PSOE. 

Esto suele ocurrir en partidos políticos sin ideología, donde la frase favorita es la de Groucho Marx "Estos son mis principios y si no le gustan tengo otros", y aprovechan su disfraz de camaleón para ejercitar el deporte de "divide y vencerás" o "a río revuelto ganancia de pescadores" que es lo que intentan hacer con el Partido Socialista, o al menos eso es lo que se desprende de sus palabras. 

Ciudadanos empieza a oler a "chamuscado" gracias a su acuerdo con la ultraderecha para conseguir la mesa del Congreso y un, ya casi evidente, gobierno del PP-C´s en Andalucía. Ahora la única forma de lavarse la cara es argumentando que están de parte de Lamban y de García-Page pero no de Pedro Sánchez.  

Insisten en hacernos creer que España está dividida entre independentistas y constitucionalistas, cuando en realidad en España hay una pequeña facción de independentistas entre los constitucionalistas; y es que a las cosas hay que llamarlas por su nombre.

España sigue rigiéndose por la izquierda y la derecha y  Ciudadanos, por muy progresista que se quiera presentar, no deja de ser un partido que quiere pactar en Castilla-La Mancha y Aragón con el PSOE, porque ven muchas posibilidades de triunfo, pero no quieren pactar con Andalucía, porque allí han perdido el gobierno regional, porque si lo que intentan hacernos creer es que Susana Díaz es independentista y amiga de Sánchez, cualquier ciudadano español se dará cuenta de que están mintiendo y que lo que quieren hacer en realidad es apuntarse al "caballo ganador". 

elObservadorDCLM