Una historia de los ochenta / José Luis Real

La novela “Avión Club” de Carlos Santos es una historia  de la década de los ochenta.  La narración gira en torno a uno de los establecimientos de ocio nocturno más representativo de Madrid, situado en el acomodado barrio de Salamanca.  Lo que en el franquismo era un discreto bar de alterne, con la llegada de la democracia era un punto de encuentro de personas de  todas las edades e ideologías hasta su cierre definitivo en 1994. Esta novela  puede ser la segunda parte del ensayo “333 historias de la transición”, pero como bien  dice el autor,  los lectores prefieren conocer los hechos históricos  bajo el formato de la novela, por su amenidad o por la identificación con sus personajes.  La narración  del “Avión Club” es sobre todo la historia de su pianista César, capaz de tocar e improvisar todo tipo de piezas musicales para el alborozo y disfrute de los clientes. Es inevitable la referencia al pianista Sam en el Café de Rick, en la película “Casablanca”.

Leer una historia sobre los años ochenta supone un ejercicio de nostalgia, sobre todo para los que en aquella década eran jóvenes o adolescentes, porque estaban en plena ebullición de sus vidas. Así pues, el movimiento cultural de la movida está muy presente en las páginas del libro, reflejando una forma de vida más libre y desenfadada, también con el tremendo azote que supusieron las drogas para toda una generación. Hay en la novela  un repaso de acontecimientos políticos, sociales culturales, que eran temas de conversación en el  Avión Club. Había tragedias muy cercanas, como eran los continuos atentados de ETA y el envenenamiento que produjo el aceite de colza, pero también había una cierta ilusión por la construcción de un país. Los  lectores que tengan menos de cuarenta años leerán esta obra como un ejercicio de antropología cultural, mientras que los lectores que vivieron con intensidad  la década de los ochenta recordarán con emoción un trozo de de su  vida.

José Luis Real