Dudas existenciales: ¿Beneficia a CLM el convenio sanitario firmado con la Comunidad de Madrid?

Si recuerdan esa tonta cancioncilla que dice  “tres cosas hay en la vida: salud, dinero y amor”, estarán conmigo en que no es casualidad que la lista de esas tres cosas esté encabezada por la salud sin la cual el uso y disfrute de las otras dos sería inviable.

Como estoy convencida de que es el principal pilar del Estado de Bienestar, siempre leo con especial atención las noticias relacionadas con la sanidad, y ahora mismo el tema más candente es que este jueves las Cortes Regionales aprobaron (con los votos a favor del PSOE y Podemos y en contra del PP) una resolución para que el Gobierno regional revise y/o suspenda el convenio sanitario que en los últimos coletazos de su mandato firmaron, a mi entender de manera sospechosamente precipitada, los Consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha y de la Comunidad de Madrid, por una duración de cuatro años prorrogables.

En la página Web del SESCAM podemos leer: “El lunes 4 de mayo ha entrado en vigor el convenio sanitario entre Castilla-La Mancha y Madrid, rompiendo así las barreras administrativas entre comunidades autónomas y acercando los recursos sanitarios a los pacientes. Este acuerdo permitirá al ciudadano elegir centro hospitalario en una comunidad distinta a la de su residencia habitual, evitando así que un paciente de Guadalajara o del norte de Toledo deba desplazarse a centros sanitarios muy lejanos a su residencia”.

Si miran el cuadro podrán observar los minutos que se ahorran (según Google Map) los pacientes de los pueblos de la zona Norte de Toledo según elijan ser atendidos en el Hospital Virgen de la Salud de la capital regional o se decanten por desplazarse al Hospital Universitario Infanta Cristina de Parla o al Hospital del Tajo de Aranjuez:

No sé a ustedes pero a mí, ni me parece mucho ahorro de tiempo (el máximo son 17 minutos) ni me parece que quien opta por venir a Toledo se desplaza a un centro sanitario muy lejano a su residencia (en ningún caso llega a 45 minutos).

Otra de las cosas que prevé el acuerdo es que los fármacos de dispensación hospitalaria prescritos por los médicos madrileños serán dispensados en los hospitales de Castilla-La Mancha. Es decir, versionando un célebre dicho, los médicos madrileños (sin tener que preocuparse del gasto farmacéutico o el coste del tratamiento) disponen y los hospitales regionales los ponen.

En el apartado preguntas más frecuentes de la página Web del SESCAM, una de las que se incluye es la siguiente: “Si de forma voluntaria elijo ser atendido en el Hospital Infanta Cristina o en el Hospital Universitario del Tajo, ¿me atenderán en Madrid de todo lo que me ocurra?”. Esta es la respuesta: “En relación con la Atención Primaria los pacientes seguirán siendo atendidos en su centro de salud por los mismos profesionales. Para las especialidades no contempladas en la cartera de servicios de los hospitales Universitarios Infanta Cristina de Parla y del Tajo de Aranjuez, los pacientes deberán ser derivados por el Servicio Madrileño de Salud al hospital básico de primer nivel de su comunidad autónoma de origen, Castilla-La Mancha y, en concreto, al Complejo Hospitalario de Toledo”.

En la siguiente tabla podemos comparar las carteras de servicios ofrecidas por los hospitales de Toledo, Parla y Aranjuez (datos obtenidos de sus respectivas páginas Web):

Mientras que los pacientes de Guadalajara son derivados a hospitales de Madrid con la cartera de servicios completa  (Hospital Ramón y Cajal, Hospital La Paz y Hospital Puerta de Hierro en Majadahonda), los de la zona Norte de Toledo son atendidos en hospitales con la cartera de servicios básica.

Resulta evidente que las papeletas de ser derivado por el Servicio Madrileño de Salud (¡manda narices!) al C.H. Virgen de la Salud de Toledo, son más altas según se elija el Hospital Universitario Infanta Cristina de Parla o el Hospital del Tajo de Aranjuez y que aumentan cuanto más compleja sea la dolencia. “Nos quitan los pacientes en el plazo que quieren, nos cobran lo que ellos deciden y nos devuelven los pacientes más complejos", denunció Jesús Fernández Sanz, actual Consejero de Sanidad, después de preguntarse sobre las ventajas que, para los pacientes de Castilla-La Mancha, tiene un acuerdo que contempla inversiones en hospitales de otra Comunidad Autónoma y que, además, “discrimina a los pacientes según los procesos por los que deben ser atendidos”.

Frente al mantenimiento de un convenio en el que solo una de las dos Comunidades, no la nuestra precisamente, sale beneficiada, el Gobierno regional defiende, como única manera de proporcionar equidad en la atención sanitaria, el fondo de cohesión sanitaria instrumento creado en 2001 para garantizar que cualquier ciudadano que no tuviera acceso en su autonomía a determinado tratamiento lo pudiera recibir en otra.

Y yo me pregunto, si el Partido Popular de Castilla-La Mancha está tan preocupado porque, al anular el convenio sanitario con Madrid, PSOE y Podemos van a cargarse la asistencia sanitaria, como es que no protesta ante el hecho de que el gobierno de Mariano Rajoy haya dejado sin dotación presupuestaria para 2016 al fondo de cohesión sanitario que, durante años, ha servido para financiar estrategias nacionales de salud (cáncer, enfermedades raras, etc.) y costear los tratamientos en las unidades de referencia nacional para enfermedades complejas.

¡Eso sí que va a generar desigualdad y dificultades para los ciudadanos!

Teresa Suárez