Toque al sobrino de Cospedal en Vértice

Apenas un mes después de haberse hecho con la presidencia de Vértice 360º, José Herrero de Egaña ya se ha ganado su primer toque de atención. Han sido los gestores de Nomura, accionistas de referencia de la productora, los que han mostrado sus dudas frente al ascenso del sobrino de Cospedal a la máxima responsabilidad de la cotizada con una notable rebaja de participación.

Nomura Holdings, que hasta ahora controlaba un 11,5% de Vértice, ha reducido su apuesta hasta el 9,85% de la productora apenas un mes después de que Herrero de Egaña asumiera su presidencia. Un movimiento del que se ha dado rápido traslado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), apenas un día después de haberse producido. Algo que llama poderosamente la atención de los analistas en un momento en que se apunta a la audiovisual como posible ganadora de los concursos de externalización de la televisión pública valenciana, según publica Elboletin.com.

En este sentido, aunque la reducción de peso de los nipones no es muy abultada en términos absolutos, sí sorprende que las ventas hayan rebajado el peso de Nomura justo por debajo del umbral del 10%, uno de los que la CNMV considera como claves para valorar el control de un inversor sobre una determinada cotizada. Y es que, los contratos de externalización no llegan -menos aún los de privatización- y las finanzas de Vértice son cada vez más estrechas a pesar de la inyección de capitales de los estadounidenses de HIG Capital en una de las filiales del grupo cotizado, precisamente en la que se ocupa de los servicios audiovisuales para terceros.

La 'espantada' de los de Nomura, que mantienen su participación a través del fondo FSS Luxembourg I, coincide además con crecientes rumores sobre bruscos cambios en el mapa de poder de la compañía. La salida de Manuel García-Durán de la cúpula directiva de la que es también filial de Ezentis, cuya presidencia sí sigue ocupando, ha hecho pensar a muchos en que la retirada de la firma de telecomunicaciones podría ser inminente. El golpe desinversor que supondría la búsqueda de nuevo dueño para el 27,8% de la compañía que aún aguanta en cartera podría ser más que notable en Bolsa.