Feijóo: España va bien por culpa de Sánchez

Para Feijóo España solo irá bien cuando él sea presidente. Y si España ya iba bien ahora, aunque él lo niegue, se apuntará todos los méritos cuando él sea presidente como pretende serlo a partir del 23 de julio. Ahora mismo, como manda el sanchismo la economía va fatal en España aunque todos los datos económicos, PIB, empleo, empresas, digan lo contrario.

Con los datos conocidos estos días, el sanchismo informa: “Eurostat confirma la robustez de la economía española. El PIB avanza en tasa interanual más del triple que la media de la UE. El empleo crece otro 1,3% en el trimestre, más del doble que la media. Frente a los agoreros del apocalipsis, datos y realidades”.

Eso dice Sánchez y los datos reales aseguran además que hay cinco países del euro en recesión: Alemania, Irlanda, Estonia, Lituania y Hungría. Como media, el Producto Interior Bruto de los países de la UE ha caído a 0,1 por ciento en el primer trimestre. Eso es lo que Feijóo querría que sucediera también en España. Pero resulta que, con el sanchismo, nuestro país sigue creciendo, un 0,5 por ciento. Los datos son magníficos en relación con la economía del resto de los países del entorno, eso no lo puede consentir el líder del PP y por eso lo niega. Niega los datos oficiales de los organismos que controlan la economía de la zona euro. Lo dice Feijóo, lo dice Ana Rosa y santas pascuas. 

Si tras las generales se produce el milagro de que una mayoría de españoles voten al PP y a Vox, también se producirá el famoso milagro económico y España empezará a salir de la tremenda crisis en que la ha hundido el sanchismo aunque eso sea una gran mentira.

Hay quien dice que PP y Vox tendrán que gobernar de verdad para que los agricultores, ganaderos y una enorme mayoría de sus votantes despierten del sueño inducido, vuelvan a conectar con la realidad y el jefe de campaña del PP se trague sin atragantarse sus palabras en las que asegura que Feijóo nunca gobernará con extremistas y que piensa hacer una campaña electoral limpia y pura.

elObservadorDCLM