Diez motivos por los que las élites económicas cambiarán de estrategia y apoyarán a Pedro Sánchez

Parece que a quienes diseñan la estrategia de la derecha con el único objetivo de que vuelva cuanto antes al gobierno se les están torciendo las cosas y van a tener que tomar un rumbo diferente y tal vez impensable, un radical cambio de sentido. 

En primer lugar, Pedro Sánchez. Ha resistido los furibundos ataques contra su imagen, contra su gobierno y contra su política, lanzados por la oposición y apoyados por una ingente cantidad de medios de comunicación con sus titulares y sus tertulianos abrasivos. Parece de otro planeta, se crece con las ofensivas, nunca da la imagen de tirar la toalla. 

En segundo lugar, el liderazgo de la derecha. No ha funcionado la defenestración de Pablo Casado por la ventana de Génova. Todas las esperanzas se pusieron en Núñez Feijóo, pero se han esfumado ya por dos causas principales. Una, su escasa preparación para lidiar en la Villa y Corte, sus numerosos errores que han sido objeto de chanza en las redes sociales. Y segundo que, en realidad, quienes mandan en la derecha española están más cerca de Ayuso y han demostrado en varias ocasiones que es la primera en la cadena de obedezco y mando. Feijóo ha quedado varias veces desautorizado por las cesiones ante Ayuso, la última la supuesta ruptura con Vox.

En tercer lugar, el tremendo lío con Vox. Todo el mundo sabe que se trata de un grupo escindido del Partido Popular, que en realidad son lo mismo, pero que se utiliza a Abascal para conseguir los votos de los ultras y luego dárselos al PP. Todo lo demás es puro teatro, un teatro que se complica cuando los de Abascal tratan de marcar distancias con su partido matriz, teniendo en cuenta su condición de frentistas que, al fin y al cabo, resulta bastante adictiva. La guerra montada por la Monasterio no ha gustado nada a las élites.

En cuarto lugar, el tremendo fiasco anunciado de la moción de censura que ha dejado al descubierto la escasa autenticidad de la oposición, con Abascal y Tamames en Madrid y Feijóo en Bruselas, disimulando que con él no iba la cosa. Una moción que solo a beneficiado a… Pedro Sánchez. Otra vez.

En quinto lugar: no llega el apocalipsis. Igual que ha sucedido con la anunciada para el 23 de marzo llegada masiva de extraterrestres a nuestro planeta, la desgracia económica no llega a España. De nada sirven los pésimos augurios, las visitas a Bruselas, la pandemia y la guerra de Putin. Sumando todo ello, la economía marcha mejor en España que con el gobierno del PP y en relacion con el resto de los países de la Unión Europea y Pedro Sánchez se está convirtiendo en un líder de referencia en Europa.

Sexto: a pesar del empecinamiento de Podemos por intentar demostrar que es el verdadero partido de izquierdas, pese a sus numerosos inventos y aunque ha dado la impresión de una ruptura en el gobierno de coalición, el propio Sánchez ha devuelto la cordura ya que el enfrentamiento de la izquierda es la mejor baza para la derecha. Muchas veces se ha caído en la trampa, pero parece que ya no cuela. Hay más cordura en la izquierda que en la derecha. Además, Podemos ha marcado una senda de apoyo social que ha espoleado al PSOE en beneficio de los menos favorecidos.

Séptimo: ETA y los rompe España. Definitivamente y aunque le duela tanto a la estrategia de la derecha, ETA ha desaparecido, acabó con ella un gobierno socialista y la propia cordura de los vascos. Aznar les pidió que se convirtieran al parlamentarismo y así lo hicieron. Ya no hay nada que objetar a los demócratas del País Vasco y de Cataluña donde el ibuprofeno de Sánchez también ha funcionado. Hay paz en Bilbao y en Barcelona, mucha más que cuando gobernada el Partido Popular.

Octavo: A pesar de las crisis mencionadas, las grandes empresas y sus grandes dirigentes llevan un tiempo de gloria infinita, recibiendo grandes ingresos e inmensos dividendos. Hace poco un observador extranjero me comentaba: no sé qué tienen estos empresarios contra el gobierno de coalición, nunca les ha ido tan bien como ahora. Tal vez la clave está en que todo el capital va para las empresas y no tengan que repartirlo en la corrupción con un partido político y un gobierno.

Noveno: Este gobierno también apoya a los menos favorecidos con numerosas medidas que nunca ha apoyado la derecha. Aumentan y se garantizan las pensiones, hay menos paro, hay más ayudas, existe la clara y cierta sensación de que el gobierno actúa de manera muy diferente a como lo hizo el gobierno del PP con crisis anteriores, abandonando a las clases menos favorecidas para hacer más ricas aún a las más poderosas. Es importante para las grandes empresas que las clases trabajadoras estén satisfechas.

Décimo: Los medios de comunicación que están al servicio de la maniobra para derrocar cuanto antes al gobierno dan ya la sensación de cierto agotamiento, ha descendido su credibilidad porque sus titulares tienen poco que ver con la realidad por mucho que intenten apuntalarlos con la insistencia y la supuesta credibilidad de sus verdades a medias. Puede que al final se imponga la realidad.

Debido a estas diez razones, lo más probable es que quienes mandan en la derecha decidan cambiar su apuesta, mandar a otro planeta a la banda de ineptos que no han podido con Sánchez con toda la maquinaria en sus manos y cambiar definitivamente de rumbo. No les queda ya otra que apoyar al actual gobierno porque al final no les queda más remedio que ser simplemente prácticos.

elObservadorDCLM