15.12.2019 19:12h.

Información Creativa

Por Julio García-casarrubios Sainz

Valdepeñas, 15 de diciembre de 2019


La clave de una reforma educativa en profundidad adaptada a las necesidades del siglo XXI consiste en trabajar en las habilidades que debe desarrollar un alumno para hacer frente a la vida que le espera. Hay que desterrar, de una vez por todas, los criterios basados en la selección. Selección que solo tiene en cuenta, calificaciones de unas materias, de unos resultados académicos, diseñados con criterios competitivos.

Kathy Hirsh-Pasek, profesora de sicología en la Universidad de Temple en Filadelfia es autora del libro "Becoming Brilliant" (volviéndose brillante). En este libro expone minuciosamente el desarrollo temprano de los niños, dirigido a los padres, para la educación del futuro de sus hijos. Puede servir muy bien como orientación sobre el fundamento de todo sistema educativo en las enseñanzas obligatorias.

La primera habilidad que un alumno, inmerso en la sociedad actual, debe trabajar es en "pensar de manera crítica". Hay que preparar al alumno a vivir rodeado de medios de comunicación y mensajes que le llegan, por los más variados recorridos. Hay que trabajar sobre la habilidad de reconocer el origen de esos mensajes, para ponerse en alerta, no sea que pretendan cautivarlo, o llanamente engañarlo. Hay que crearles el hábito de buscar la información a través de todos los medios que tienen a su alcance; a escuchar y oír, para formar su propio criterio. Debemos inculcar en el alumno el espíritu de investigación. La información no debe llegarle como mero elemento pasivo, sino que él mismo la busque, la investigue, la valore, hasta hacerla propia.



Julio García-Casarrubios Sainz
Valdepeñas. Ciudad-Real


Busca en dclm.es "Qué Educación queremos", y escribe tu opinión