Los tiramisús de Rina

Rina le dijo a todo el mundo que había estado en Estados Unidos, pero en realidad viajó a la región del Veneto, paseó en góndola por Venecia y conoció al presidente de la cadena de restaurantes Taulá, Arturo Filippini, cuando venía del súper con una bolsa llena de ron Amareto, huevos, azúcar, cacao, queso y un café misterioso que solo conocía el chef italiano. ¿Para qué quieres todo eso? Esto, Rina, es el corazón de mi secreto, el mejor tiramisú que haya probado paladar humano.

Filippini le contó a Rina el origen de ese energético postre creado en los burdeles venecianos para dar fortaleza a los clientes tras la segunda guerra: traducido a tu idioma quiere decir “tira mi su”, algo así como levántame el ánimo, ya sabes.

Sin que Arturo lo supiera, Rina se coló en su cocina y apuntó en una libreta cada movimiento y hasta las respiraciones de Filippini.

De regreso a España, Rina preparó su tesoro en la gruta alquimista de La Cavatina, deshaciendo los paladares más exquisitos.

Cuando no se maquillaba, Rina elaborada los tiramisus más ricos que he probado en mi vida. Ella sigue diciendo que había estado en Estados Unidos.

Kimi