¿Socialismo del siglo XX o XXI?: ¿Acaso hay que matar al padre para que viva el hijo? | Miguel Nieto

Dice Pedro Sánchez que en las primarias del PSOE está en juego el socialismo del pasado y el del futuro. A sus ojos Susana es el pretérito y el porvenir lo pone él.

Analicemos las consecuencias de su eslogan. Si el socialismo del pasado es el que mayores cuotas de igualdad trajo a los españoles con la implantación de los pilares básicos del estado del bienestar (pensiones, sanidad y educación), ¿por qué lo considera desfasado?

Si el socialismo del pasado es el de Pablo Iglesias, el de Felipe González, el de Zapatero, que fueron los artífices de un partido de Gobierno y de justicia, ¿por qué renuncia a su legado?

¿Acaso la historia tiene caspa? La historia es como es y no como se escribe. Hacer lecturas maniqueistas de ella para soportar una campaña de primarias es la demostración empírica de la falta de solidez del discurso. ¿Hay que negar al padre para poner en valor al hijo?

Vayamos a ejemplos más sólidos todavía: Susana es el pasado ¿desde cuándo? ¿Desde que le dio 28 mil avales para que destrozara a Madina con una demostración de fuerza que ni la soñaba meses antes? ¿Ese pasado de hace apenas dos años es el rancio y casposo?

¿Saben?, aquel que se conduce por la vida sin memoria, no reconoce a su padre y a su madre. Aquel que no es agradecido con sus ancestros, está construyendo un presente sin pilares sólidos para el futuro.

¿El socialismo del futuro es el que representa los peores resultados electorales de la larga historia del Partido Socialista cosechados por Pedro? Si es así, ¿con qué base trabaja para convencernos de que ese socialismo es mejor que el que nos llevó al gobierno de España con Felipe y Zapatero?

Y por qué agrede a socialistas albaceteños históricos como José Jerez, Salvador Jiménez, Tomás Morcillo, Aurora Zárate y otros que le apoyan en su campaña de primarias. ¿Acaso ellos son el nuevo socialismo y su pasado hay que borrarlo? Y más todavía, ¿Acaso Manolo González Ramos, su mentor en esta provincia, no viene ocupando cargos desde que era niño, propiciados por Bono, Barreda y Zapatero, los mismos que estuvieron en el acto de Madrid? ¿En qué quedamos?

Todavía añado más: ¿Los que no votaron a Manolo en el congreso que resultó elegido secretario provincial, el ala critica en la que están algunos de los que he citado, que forman parte de los que le apoyan ahora, son pasado, presente o futuro?

¿Es que para ganar unas primarias hay que decirle a Juan Francisco que es un carcamal que representa al socialismo casposo y desfasado? No creo que haya que renunciar a estos socialistas que lo dieron todo por el partido para escribir la historia del socialismo actual y del futuro.

Incluso me pregunto ¿Es que los socialistas de la casta de los fontaneros, de los pastores, de los albañiles, de los muleros, que lucharon por las libertades, que pagaron con sus vidas tener ideales, son socialistas a borrar de la historia? ¿Cómo se puede defender el socialismo del futuro sin esos pilares?

Claro que hay que hacer una reflexión sobre lo que significa ser socialista, claro que hay que adecuarse a los tiempos, claro que no solo basta mirar al pasado, claro que sí, pero por favor un respeto a los más sagrado que hay en una familia, los padres.

Y la última pregunta ¿cuántos de esos socialistas de Albacete que he nombrado renunciarían a la historia que ellos han ayudado a escribir del socialismo de nuestros días? ¿Hubieran estado incómodos entre Felipe, Zapatero, Rubalcaba, Abel Caballero, Guerra, Bono, Page..?

Por favor, un respeto con lo más sagrado del socialismo del siglo XX, porque gracias a ellos muchos hijos de fontaneros, de pastores, de albañiles pudieron estudiar, igual que millones de españoles pudieron conocer el mar.

Cuidado con las palabras que las carga el diablo.

Miguel Nieto

Periodista