Castilla-La Mancha creará 8.416 nuevas plazas de empleo público en cuatro años

García Page ha reconocido el retraso en la elaboración de estos presupuestos, que aprobará mañana el Consejo de Gobierno como paso previo a su discusión en las Cortes regionales, pero sostiene que ha merecido la pena. “Cospedal tardó prácticamente año y medio en presentar un proyecto de presupuestos, y entre tanto hizo desaparecer miles y miles de puestos de trabajo”. Y ha añadido que da por bueno este retraso, ”porque lo que nos ha importado es el fondo, qué espíritu estaba detrás de cada cifra”.

El presidente regional ha calificado de “francos” estos presupuestos y ha apuntado que las posiciones de PSOE y Podemos no están muy alejadas, pese a las diferencias. “Un parte importante de los presupuestos los teníamos escritos, pues tras las elecciones de hace siete meses el objetivo que nos planteamos era, de entrada, parar la hemorragia, y ese creo que es un balance que puedo plantear como presidente y con orgullo: nadie puede decir que hemos agrandado la brecha sino que hemos echado mucha argamasa”.

El líder socialista dice que si estuviera en el gobierno Cospedal, la anterior presidenta regional, se estaría planteando un presupuesto con muchas más derivaciones a la sanidad de Madrid y más recortes en el ámbito educativo y un desabastecimiento de las “despensas sociales”.

“Este es un presupuesto en blanco, muy distinto en su filosofía, intenciones y objetivos al presupuesto en negro de Cospedal, ha asegurado García Page. “Este es el presupuesto que podemos, pero ni Podemos ni PSOE nos conformamos; el año siguiente será más claro aún”, ha asegurado el presidente regional, quien ha matizado que este presupuesto “no lo va poder recurrir Montoro”.

En su opinión, el acuerdo alcanzado entre PSOE y Podemos es “un acuerdo sensato, en el que gana el sector publico, la sanidad, la educación, los que peor lo están pasado y también  los que quieren ganar dinero, y eso va unido a que funcione la rueda de la igualdad social.”

José García Molina, por su parte, al referirse al retraso en la presentación de estos presupuestos, lo ha justificado en que “había que  revisar todo y había que iniciar la recuperación y el rescate de una ciudadanía que ha sido maltratada por las políticas anteriores”. Y ha añadido que “el dinero público tiene que servir para el desarrollo de la región y el beneficio de la mayoría de los ciudadanos de Castilla La Mancha y no sólo a una parte”.

El líder de Podemos ha mostrado su oposición a que se sigan subvencionando algunas prácticas que no  afectan a la mayoría. Y, concretamente, ha dicho no  acabar de entender “que gastemos medio millón de euros en la financiación de servicios religiosos en el sistema sanitario y la dependencias”, y ha instado al gobierno de la nación a que vaya modificando estas prácticas, “que no recogen el espíritu de una sociedad democráticamente madura”.